Cuando hace mucho calor, lo primero que viene a la mente de muchas personas es un vaso de cerveza helada.
Pero no muchos saben que esta deliciosa bebida se usa en la cocina desde tiempos remotos, como ingrediente de exquisitos platos dulces y salados.
La cerveza tiene muchas variedades, pero la rubia es la más apropiada para usar en platos de cerdo, pollo y otras carnes, mientras que la negra es más adecuada para cocinar carnes más fuertes como el jabalí y otros animales de caza.
En general se usa como sustituto del vino, para ablandar carnes, hacer arroz a la chorrera y hacer crecer la masa de hornear panes y pasteles, debido a su contenido de levadura.
No te preocupes por su contenido de alcohol, pues este se evapora durante la cocción.
Salsas, asados y guisos… ¡pero además, pasteles!
Si te decides a probar una receta con este ingrediente, asegúrate de sacar la cerveza del regrigerador y darle tiempo para que alcance una temperatura templada antes de añadirla a una receta.
Y ten cuidado al usar la sal, pues la cerveza refuerza los sabores salados.
Para preparar una salsa de marinar con cerveza, mézclala con cebolla y pimienta. Una buena proporción consiste en 3 tazas de cerveza con ¼ taza de aceite de oliva, 2 cucharadas de salsa de soya y el jugo de un limón.
Si se trata de pollo o chuletas de cerdo, prueba a frotarlas con mostaza y cerveza, lo cual resulta tan simple como sabroso.
Es muy recomendable el uso de la cerveza para guisar, porque ablanda las carnes, así es que la próxima vez añade esta bebida en lugar de caldo o vino a tus guisos de aves, cerdo o carne de res.
Si vas a freír camarones o empanadas, prepara una mezcla de agua mineral y cerveza clara para rebozar. La carbonización de la cerveza hará que la masa se dore de manera uniforme.
Y si haces carne o pescado al horno, agrega una taza de cerveza en la fase final del asado, para que se mezcle con los jugos que se desprenden al vapor y mejore su textura y sabor.
Si hasta aquí te han sorprendido los múltiples usos que tiene la cerveza en la cocina, déjame decirte que esto no es todo, pues también es muy útil al preparar recetas de repostería.
Añadida a la masa de pasteles en una proporción de 2 cucharadas por cada taza de harina, ayuda a que esta crezca, pero se debe usar solamente cerveza ligera, para que no le dé un sabor amargo a la receta.
Sí, comprendo que te cause extrañeza lo de los postres con cerveza, así es que, como vista hace fe, aquí te presento una receta que te acabará de convencer.
¡Disfruta de este bizcocho y riega a los cuatro vientos las múltiples virtudes de la cerveza en la cocina!
Bizcocho a la cerveza
Ingredientes:
- 4 huevos
- ½ taza de mantequilla
- 1 taza de azúcar
- 1 taza de harina
- ½ taza de cerveza
- 1 cucharada de levadura
- 1 pizca de sal
- Ralladura de 1 naranja y 1 limón
- Azúcar glass
Preparación:
- Bate la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa.
- Añade los huevos y sigue batiendo.
- Agrega la sal, la cerveza, la ralladura de limón y naranja.
- Añade la harina tamizada con la levadura y mezcla sin batir.
- Enmantequilla y enharina un molde y vierte la masa.
- Cocina en el horno a 350° F (170° C) por 45 minutos.
- Después de ese tiempo saca del horno, deja enfriar y desmolda.
- Espolvorea con azúcar glass.